Se terminó el mundial y siento un vacío enorme.
Este mundial lo viví como nunca. Vi casi todos los partidos, lo disfrute, me
apasione, y con lo que garpo de DIRECTV más vale que así haya sido (espero que
para el mundial que viene me solucionen el temita delay)
La tristeza hoy es más grande que ayer, se siente
nostalgia, que poquito nos faltó para hoy estar todos festejando. Pero no sucedió,
estamos todos llorando.
Tristeza, tristeza es que encima sea lunes y
tenga que ponerme a bajar esos kilos que engorde en cada partido.
Consumí tantas calorías que no podría ni contarlas: papitas, bizcochuelo,
facturas, miguitas, picada, cerveza, fernet...
Con este mundial vuelvo a comprobar que poco
saben las mujeres de futbol, soy machista y qué? No soporto que opinen, que
hagan comentarios. Mejor sigan hablando del Pocho Lavezzi, que por cierto para mí
es un mito urbano.
Por último no entiendo a la gente que no le gusta
el Mundial, que no ve los partidos, que no sabe cuándo juega Argentina, que no
se junta con amigos para verlo. Me resulta raro, me resulta sospechoso.
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